
Hace unos días mientras retornaba a casa a pie, luego de mucho tiempo me vi frente a frente con el río Rímac - sí ese al que le gustaba hablarnos durante la noche o por lo menos a mis ancestros- de manera inevitable me detuve, no sin antes sentir un controversial sentimiento, enseguida exclame ¡que tal hedor!, pero esta idea se perdió con lo que vi.
Vi a un "amigo" moribundo, sucio, casi sin agua y lleno de desechos de toda clase, en conclusión, un ser sin sonrisa. Y pensando en el evento seguí mi camino y ahora me pregunto: ¿Cuándo empezó la ingratitud con aquel del que nos servimos?
La idea de escribir esto no es dar un mensaje de "salvemos el medio ambiente", porque haciendo un mea culpa al respecto, muchas veces he arrojado basura donde he podido como la mayoría. Pero al parecer hemos olvidado que la ubicación de la capital de nuestro Perú es decir Lima, fue determinada en gran parte por el "río hablador", más allá de haber sido zona estratégica de escape para los españoles de aquel entonces, mucho tuvo que ver el valle del Rímac.Hemos olvidado a esos atractivos y variopintos (según me cuentan) camarones que retozaban libremente en "el hablador". Y con cierto sarcasmo personal me pregunto hoy: ¿Quién podría inspirarse en el río Rímac para escribir una canción de amor, un vals, una polkita o quizás un reggaetón?
Lima nació con 70 habitantes, luego por los años 1600 cuando éramos colonia se volvieron 14000 los pobladores, para aquel entonces, "el hablador" se lucía cual muchachita fértil guapa y voluptuosa ganándose el respeto y admiración de los entonces habitantes. Esta muchachita creció y con ella la población... Hasta que lo EVITABLE no se evitó y fue cruelmente ultrajada, se sirvieron de ella y la dejaron estéril y muda.
Hoy somos cerca de 8 millones de limeñitos indiferentes que seguimos ultrajando a la misma muchachita que ya se volvió una tía amargada por nuestra indiferencia...
Termino mi reflexión compartiendo con los lectores mi anhelo de poder ver alguna vez un camaroncito en mi rio que tanto me dio.
Comentarios
Buen texto sobre nuestro río. Espero seguir leyéndote. Tu escritura sí que se va consolidando.
¡Felicitaciones!